Muchas personas creen que los apoderados son un factor que contribuye al fracaso de los estudiantes, sobre todo en situación de vulnerabilidad, y que los reportes de asistencia para apoderados no sirven. Pero la realidad es que los apoderados de estudiantes con ausentismo piensan que sus hijos han acumulado menos ausencias de las que realmente tienen (incluso menos de la mitad), y que sus hijos faltan menos que sus compañeros (apenas un 28% de los papas de estudiantes con mas ausentismo pensaban que sus hijos faltaban más que sus compañeros) (Rogers & Feller, 2018). Se ha comprobado que reportar de manera efectiva a los apoderados sobre la situación de asistencia de sus hijos involucrándolos, reduce el ausentismo, corrige creencias erróneas de los padres sobre la asistencia de sus hijos e impacta en todos los niveles.