Un “hacer ahora” es una estrategia desarrollada por Doug Lemov en su libro “Teach like a champion” para comenzar el aprendizaje. Consiste en actividades cortas y rápidas que se realizan al ingresar a la sala de clases, permitiendo que todos los estudiantes activen su pensamiento en torno a un aprendizaje relacionado a lo que se enfrentarán o a un contenido que se requiere reforzar.

Esta técnica se utiliza para asegurar que los estudiantes realicen alguna actividad productiva, para recuperar aprendizajes de clases anteriores o bien para reforzar algún contenido o experiencia previa importante, fomentando la autonomía frente al trabajo y aprovechando al máximo el tiempo de cada lección. Se destina un tiempo corto, mientras el profesor saluda a los estudiantes en la puerta, organiza los materiales a utilizar en la clase, llena el libro de clases o borra lo que quedó en la pizarra de la clase anterior, el objetivo es que se pueda aprovechar al máximo el tiempo de clase.

Un “hacer ahora” efectivo debe cumplir con cuatro criterios para asegurar que sea enfocado, eficiente y efectivo:

1. Debe estar todos los días en el mismo lugar para que tomarlo y comenzar a trabajar sea un hábito para todos tus estudiantes. Las opciones para ubicarlo pueden ser:

• Escribirlo en la pizarra y tenerlo listo una vez que los estudiantes están entrando a la sala. 
• Imprimirlos y dejarlos apilados en una mesa o escritorio justo al entrar por la puerta para que los estudiantes los tomen en cuanto entren.
• Ubicarlos en el escritorio de cada estudiante antes de que entren (tiende a ser la más común en educación básica).

 

2. Los estudiantes deberían poder completar el “hacer ahora” sin ninguna instrucción del profesor, sin discusión con sus compañeros y en la mayoría de los casos sin ningún otro material aparte de lo que ya se les entregó. Por ejemplo, si el “hacer ahora” consiste en escribir una oración interpretando un documento, este debería estar colocado en algún lugar fácilmente visible para todos o copiada en el papel que se les entregó. Esta actividad debe promover la autonomía y, por lo tanto, debe ser un trabajo independiente. 

3. La actividad debería tomar entre tres y cinco minutos en completarse y debería requerir que los estudiantes pongan un lápiz en el papel, es decir, debería haber un producto escrito de ello. Esto no solo lo hace más riguroso y más interesante, sino que te permite responsabilizar mejor a los estudiantes por hacerlo, ya que puedes ver claramente si lo están haciendo (y ellos pueden ver que tú puedes verlo). Y por supuesto, esto te permite verificar la comprensión mientras trabajan, decidiendo qué preguntas revisar y posiblemente a quién llamar para dar alguna respuesta o visibilizar un error común.

4. La actividad debería en general: 

• Prever la lección del día.
• Repasar una lección reciente.

 

Te invitamos a revisar en detalle esta actividad desarrollada por el equipo de Asesorías Astoreca en la siguiente pestaña y poder aplicarla con tus estudiantes.